Brecha generacional y la Inteligencia Artificial ¿Cómo la IA apoya y conecta experiencia, equilibrio, innovación y diversidad generacional?

Por Luis Etchenique, Consultor Senior DEIB, WHALECOM y Gaston Boireau Lahore, Especialista en L&D y Comunicación Interna, Upwork. Columna publicada originalmente en Linkedin.

En una sala de reuniones de cualquier empresa, es probable encontrar a un Baby Boomer discutiendo estrategias con un miembro de la Generación Z, mientras un Millennial revisa datos en su laptop y un representante de la Generación X modera la conversación. Esta escena, es un claro reflejo de la diversidad generacional en el lugar de trabajo actual.

Con la inteligencia artificial (IA) desempeñando un papel cada vez más importante, surge una pregunta: ¿cómo está afectando la IA a las dinámicas entre estas generaciones y quién realmente está dominando el terreno laboral?

Hablemos claro: la tecnología está cambiando el juego. La inteligencia artificial (IA) no solo está para quedarse, sino que está cambiando nuestra manera de trabajar, la forma que hacemos, pensamos (y se deciden, muchas veces) las cosas, la inteligencia artificial no solo está revolucionando el ámbito tecnológico, sino que también está redefiniendo cómo las empresas gestionan sus recursos humanos. Según el Foro Económico Mundial, la adopción de la IA puede aumentar la productividad y eficiencia, pero también trae consigo desafíos en términos de equidad y diversidad (InStride) (DOIT).

En este artículo, vamos a tratar de aproximarnos a apreciar cómo la IA está transformando la dinámica y la interacción entre diferentes generaciones en el lugar de trabajo. Veremos los desafíos y oportunidades que surgen y cómo una gestión adecuada de DEI puede sacar lo mejor de cada generación en relación con la IA.

Consideramos que no se trata de quién maneja mejor la tecnología, sino de cómo incorporamos y utilizamos esa tecnología para crear un ambiente de trabajo más inclusivo y equitativo. Un informe reciente de Accenture señala que el 95% de los empleados ve valor en trabajar con IA generativa, pero el 60% está preocupado por el aumento del estrés y el burnout.

Cuatro generaciones en el mismo lugar (hagamos espacio que llega IA).

Hoy en día, muchas organizaciones se parecen más a una reunión familiar multigeneracional que a la oficina que generaciones anteriores solían encontrar todas las mañanas de lunes a viernes, tradicional de antaño. En la actualidad, nos encontramos con Baby Boomers, Generación X, Millennials y Generación Z compartiendo espacio, en un escenario donde la alta rotación, la crisis de compromiso y los conflictos generacionales son síntomas de una época de transición. Paula Molinari (2011) nos señalaba esto en su libro “Turbulencia Generacional”, donde propone un enfoque distinto para comprender estas dinámicas, sugiriendo que se debe lograr una visión estratégica y una anticipación a los cambios, en lugar de simplemente entender las mentalidades generacionales (Molinari, 2011).

La tecnología ha avanzado significativamente en las últimas décadas, al punto de que muchas empresas han adoptado el trabajo remoto como norma. Según un informe de The Guardian, el trabajo remoto ha alcanzado una «nueva normalilidad», con el 60% de los trabajadores experimentando algún nivel de trabajo remoto durante la pandemia, y una estabilización que indica que esta práctica ha llegado para quedarse (The Guardian, 2024). Estamos viviendo un cambio de paradigma en relación a las formas y medios para trabajar, algo que ha demostrado mejorar el equilibrio entre la vida laboral y personal y reducir las tasas de abandono en un 35%.

Una investigación de Whalecom sobre el trabajo híbrido reveló que el 83,4% de los participantes respondieron que su manera de trabajar cambió después de la pandemia, y siete de cada diez señalaron que actualmente combinan la presencia en la oficina con la realización de tareas de forma remota. Otro dato destacado es que el 78% de los que trabajan en modalidad híbrida aseguró que ese esquema le permite obtener un equilibrio saludable entre la vida personal y laboral. Esto es especialmente relevante en tiempos donde la salud mental se ha convertido en una prioridad dentro de las organizaciones.

Pero, desde hace pocos años, con la llegada de la inteligencia artificial (IA), se ha vuelto un tema fascinante, tomando protagonismo y convirtiéndose en un tema por el cual diversos expertos han abordado cómo estas diferencias generacionales impactan la adopción y adaptación a nuevas tecnologías.

¿Qué puede representar la inteligencia artificial para cada generación?

Baby Boomers (1946-1964)

Para los denominados Baby Boomers, quienes se formaron en una era donde la estabilidad laboral era primordial y la tecnología sin lugar a dudas no es la que hoy vivimos, la IA puede ayudar a fomentar la diversidad en el lugar de trabajo al eliminar sesgos inconscientes en los procesos de contratación y promoción.

Desde luego, esto se puede apoyar en organizaciones que tengan conciencia y valoren al talento más allá de un número (edadismo), los algoritmos de IA bien diseñados pueden analizar currículums (hoja de vida o resumé) sin considerar variables como el nombre o la foto del candidato, enfocándose únicamente en las habilidades y experiencias relevantes. Según un estudio de la Harvard Business Review (2023), esto puede aumentar significativamente la diversidad en las empresas, permitiendo que los Baby Boomers trabajen en entornos más diversos y equitativos, aportando nuevas perspectivas y enfoques a la toma de decisiones.

Por otro lado, la IA puede apoyar la equidad en el desarrollo profesional mediante el análisis de datos de desempeño y la identificación de patrones que sugieran oportunidades de capacitación y desarrollo que de otro modo podrían pasarse por alto. Esto nos asegura que todos los colaboradores, independientemente de su edad o experiencia, tengan acceso a oportunidades de crecimiento. Un estudio de Deloitte (2020) encontró que las empresas que utilizan IA para gestionar el talento reportan una mejora en la equidad y la satisfacción de los empleados, esto significa que pueden recibir la formación necesaria para adaptarse a nuevas tecnologías y mantenerse competitivos en el mercado laboral.

La inclusión es un valor para todos, también para los Baby Boomers, quienes pueden sentirse desplazados por las generaciones más jóvenes que adoptan rápidamente nuevas tecnologías. En este sentido, la IA puede facilitar la creación de entornos de trabajo inclusivos al proporcionar análisis y feedback continuos sobre el clima organizacional. Herramientas en base a tecnología IA pueden monitorear las interacciones en la empresa y alertar sobre posibles problemas de inclusión o conflictos, permitiendo una medición e intervención oportuna. Según Microsoft y LinkedIn, el 75% de los trabajadores del conocimiento ya utilizan herramientas de IA que mejoran la colaboración y la inclusión (Microsoft, 2024), esto significa que pueden sentirse más integrados y valorados en equipos diversos.

La sensación de pertenencia (belonging, por su origen y sigla en inglés) que implica sentirse parte y uno/a más en el entorno que se es parte, ya sea familia, amigos, escuela o trabajo, sentirse parte de la comunidad (Hagerty, 1992). Es el resultado de un entorno de trabajo saludable y sentirse parte integral del equipo mediante la utilización de IA puede mejorar significativamente su satisfacción laboral y sentido de pertenencia. Un estudio de PwC (2021) encontró que las organizaciones que utilizan IA para mejorar la colaboración y la comunicación tienen niveles más altos de satisfacción y pertenencia entre sus empleados, esto demuestra que la tecnología puede jugar un papel en crear un sentido de comunidad y pertenencia en el lugar de trabajo contribuyendo a un espacio laboral psicológicamente seguro. Esto último es significativo, porque implica un entorno donde se motiva la creatividad e ideas, sin el miedo de ser juzgado, o bien un espacio donde debamos ir “en puntas de pie” (Edmondson, 1999).

Generación X (1965-1980)

La Generación X, caracterizada por su adaptabilidad y pragmatismo, puede beneficiarse enormemente de la IA para fomentar la diversidad en el lugar de trabajo. Por ejemplo, la IA puede identificar áreas de oportunidad en la gestión del talento y diseñar planes de carrera personalizados, asegurando que todos los empleados desarrollen sus habilidades de manera equitativa. Según un informe de Accenture, solo el 9% de las organizaciones están liderando en la reinvención con IA generativa, pero aquellas que lo hacen están rediseñando trabajos y roles para aprovechar mejor la tecnología, lo que aumenta la competencia, compromiso y satisfacción de los empleados con la IA.

La Generación X, conocida por su enfoque en la justicia y el equilibrio, en la equidad, puede beneficiarse significativamente al dar lugar a la transparencia salarial. Al implementar políticas que requieran a las empresas divulgar los rangos y criterios de compensación se pueden abordar las disparidades salariales basadas en género, etnia y otros factores. Este enfoque no solo promueve la equidad, sino que también refuerza la confianza y el compromiso de los empleados de la Generación X, quienes buscan trabajar en entornos que valoren y respeten sus contribuciones de manera justa y transparente.

La Generación X también valora la inclusión y el equilibrio entre trabajo y vida personal. En este sentido, la IA puede facilitar la creación de entornos de trabajo inclusivos al proporcionar herramientas que mejoren la comunicación y la colaboración, especialmente en equipos remotos o híbridos. Según un informe de Buffer, el 84% de los trabajadores remotos indican que la IA ha mejorado significativamente la colaboración y la comunicación en sus equipos. Para la Generación X, esto significa trabajar en entornos donde se sienten valorados y escuchados, lo que puede mejorar su satisfacción laboral y su sentido de inclusión.

La sensación de pertenencia es también importante para la Generación X, que a menudo actúa como puente entre las generaciones mayores y más jóvenes en el lugar de trabajo. La IA puede ayudar a sentirse más conectada con su equipo al proporcionar herramientas que faciliten la mentoría y la transferencia de conocimientos. Un estudio de IBM encontró que el 64% de los CEO creen que el éxito con la IA generativa depende más de la adopción por parte de las personas que de la tecnología en sí, subrayando la importancia de un enfoque centrado en el ser humano para construir confianza y preparación entre los empleados.

Millennials (1981-1996)

Son la mayoría en gran parte de las organizaciones. Los Millennials valoran enormemente la diversidad y la inclusión, pudiendo aprovechar la IA para promover estas características en el lugar de trabajo. Por ejemplo, puede ayudar a identificar oportunidades de rotación de roles dentro de la empresa, lo que permite a los empleados explorar diferentes áreas de interés y avanzar en su carrera sin cambiar de organización (PwC). La implementación de IA en los procesos de recursos humanos puede aumentar significativamente la diversidad, creando así un entorno laboral más inclusivo y equitativo, donde la diversidad es celebrada y valorada, mejorando el clima laboral, su satisfacción y compromiso. En la actualidad se pondera y brinda importancia a la experiencia del coalaborador en las organizaciones, la IA al determinar procesos más justos brinda un valor que refuerza esta experiencia.

Una de las formas en que la IA puede apoyar la equidad es mediante la asignación justa de recursos y oportunidades. Por ejemplo, puede analizar patrones de carga de trabajo y redistribuir tareas de manera equitativa, asegurando que ningún empleado se sienta sobrecargado o subutilizado. En este sentido, puede identificar desequilibrios en la asignación de proyectos y proponer soluciones que permitan una distribución más justa, mejorando así la satisfacción y el rendimiento del equipo, por consiguiente impactando en el bienestar de los equipos.

La IA también puede facilitar la inclusión al proporcionar subtítulos o traducción en tiempo real y soporte multilingüe en reuniones y documentos. Esto es particularmente beneficioso para equipos diversos y multiculturales que incluyen miembros de diferentes orígenes lingüísticos, así como para personas con discapacidades, lo que le permite seguir la conversación y contribuir activamente. Al eliminar las barreras del idioma y las limitaciones de comunicación, todos los empleados pueden comprender la información, lo que fomenta una mayor colaboración y equidad.

En la actualidad existen desarrollos de software que han sido fundamentales para facilitar la comunicación de personas con discapacidades del habla y la visión.

Háblalo es una aplicación que ha transformado la vida de más de 350,000 personas en 65 países, permitiendo a las personas con dificultades en su comunicación, funcionando incluso sin conexión a internet. Pero hay algo más interesante, y es que acompaña a las organizaciones a ser más inclusivas mientras apoya a la comunidad global de personas con discapacidad, tanto de cara a colaboradores y potenciales consumidores.

Be My Eyes es otra aplicación innovadora que brinda asistencia visual a personas con discapacidad visual a través de videollamadas. Los usuarios pueden recibir ayuda de voluntarios que les proporcionan descripciones en tiempo real de su entorno o de las tareas que necesitan realizar.

Por último, InterSEA, desarrollada por la ONG Señas en Acción, permite a las personas con discapacidad auditiva acceder a intérpretes y estudiantes de lengua de señas mediante dispositivos electrónicos, ofreciendo traducción y soporte en tiempo real para facilitar su comunicación y participación en diversas actividades cotidianas y laborales.

Por otro lado, los Millennials buscan un propósito en su trabajo y un sentido de pertenencia. En este caso, la IA puede ayudar a crear este sentido de pertenencia al facilitar la creación de redes de apoyo y grupos de afinidad dentro de la organización. Estas redes pueden ser formadas automáticamente al analizar intereses comunes y antecedentes similares entre las personas, promoviendo conexiones más profundas y significativas. Según un informe de McKinsey, las organizaciones que apoyan activamente grupos de afinidad experimentan un aumento del 20% en la retención de empleados.

Generación Z (1997-presente)

Para la Generación Z, la diversidad es una expectativa, no solo un objetivo. En lugar de centrarse únicamente en la contratación y promoción inclusivas, la IA puede desempeñar un papel en la promoción de la diversidad al facilitar la creación de programas de liderazgo que incluyan una amplia gama de perspectivas, identificando personas con potencial de liderazgo de diversos orígenes y proporcionarles oportunidades de desarrollo. Esto asegura transparencia, diversidad, al igual que una representación más equitativa en los niveles superiores de la empresa. Según el World Economic Forum (2023), la IA puede expandir y mejorar el aprendizaje y desarrollo, promoviendo el acceso equitativo a oportunidades de crecimiento para una amplia gama de líderes futuros (1, 2).

Al igual que diversidad la Generación Z espera igualdad de oportunidades en el desarrollo profesional. Más allá de las recomendaciones personalizadas de capacitación, la IA puede diseñar itinerarios de aprendizaje y desarrollo que se adapten a las necesidades individuales, independientemente de la ubicación o los antecedentes. Por ejemplo, puede recomendar cursos y asignar proyectos específicos que alineen con las habilidades, gustos y aspiraciones de cada persona según el momento que se encuentren transitando en su desarrollo profesional.

La IA puede impulsar la inclusión mediante la creación de programas de mentoría basados en datos al analizar las habilidades y experiencias de los empleados. De esta forma puede emparejar a los mentores con los mentees de manera más efectiva, asegurando que se maximice el aprendizaje y el desarrollo profesional. Además, puede sugerir mentorías cruzadas que promuevan la diversidad de pensamiento y la inclusión de diferentes perspectivas y multi generacionalidad.

Generación Z busca un propósito y pertenencia en su trabajo, la IA puede ayudar a crear un sentido de pertenencia al identificar patrones de desconexión y proponer intervenciones personalizadas para mejorar el compromiso. Esto puede incluir asignar proyectos significativos o roles de liderazgo temporales que alineen con los intereses y habilidades de esa persona, teniendo en cuenta que la IA puede mejorar el sentido de pertenencia y compromiso mediante la personalización de experiencias laborales y la identificación de oportunidades para el desarrollo personal y profesional.

Como hemos visto, la inteligencia artificial tiene el potencial de transformar el lugar de trabajo y cerrar la brecha generacional si se implementa de manera estratégica, inclusiva y ética, siempre considerando que detrás de cada proceso automatizado hay personas y un mercado laboral.

Como se ha mencionado en un encuentro del ITBA, donde ha participado Marcela Riccillo y Luis Maria Cravino, la IA en recursos humanos permite predecir comportamientos, entender necesidades y anticipar cambios antes de que ocurran, como identificar y mitigar el burnout mediante el análisis de patrones de comportamiento. Sin embargo, se debe tener en cuenta que no se puede confiar 100% en las respuestas que esta tecnología ofrece para tomar decisiones que afectan a las personas.

Implementada correctamente, la IA enriquece la interacción humana y mejora la calidad de vida laboral, asegurando que las decisiones importantes sigan siendo tomadas por personas, con el apoyo de estas avanzadas tecnologías. Al reconocer y valorar las fortalezas únicas de cada generación, y apoyarse en la IA, las empresas pueden crear un entorno laboral más cohesivo y productivo.

En última instancia, la clave está en recordar que, aunque la IA pueda revolucionar el trabajo y simplifique muchas cosas, ningún algoritmo puede reemplazar la esencia, el toque humano y la sabiduría que solo los años y la experiencia caminando pasillos de oficinas pueden aportar. Así que, no olvidemos que aún necesitamos de esa experiencia y el ingenio que solo las personas pueden ofrecer.