El Tinder de las madres: Malasmadres y Globant presentan la Red «Yo cuido, nosotras cuidamos»

El Club de Malasmadres, junto con la asociación Yo No Renuncio y el desarrollo tecnológico a cargo de Globant, ha lanzado la red «Yo cuido, nosotras cuidamos» en Madrid, que busca conectar a madres para intercambiar cuidados y apoyo, facilitando la conciliación de la vida personal y profesional. Esta iniciativa se enfoca en reimaginar la manera en que las madres se conectan y acompañan mutuamente, ofreciendo soluciones en un sistema que frecuentemente las aísla.

«Esta aplicación no es solo una herramienta digital. Es un espacio seguro, una red para sostenernos entre nosotras en los momentos en que la soledad aprieta y las respuestas faltan«, compartió la fundadora Laura Baena durante la presentación. La iniciativa no solo es una respuesta práctica, sino también una declaración de intenciones sobre cómo el colectivo de madres puede, quiere y debe, ser apoyado.

El evento fue un reflejo del esfuerzo y la persistencia que han caracterizado al movimiento Malasmadres a lo largo de más de una década. Para Baena, este lanzamiento representa «un sueño hecho realidad» y responde a una necesidad social urgente: crear redes formales de cuidado y apoyo que permitan a las madres delegar sin culpa y encontrar compañía en una etapa tan demandante como la maternidad.

En la rueda de prensa, se enfatizó repetidamente la necesidad de corresponsabilidad, involucrando tanto a instituciones como a empresas, y el compromiso personal de cada madre de ayudar a otras. Además, se destacó la importancia de establecer alianzas concretas con empresas que estén dispuestas a promover políticas de conciliación, y se mencionaron los esfuerzos realizados por el Club de Malasmadres para sensibilizar a las administraciones públicas y exigir el desarrollo de políticas de apoyo a la maternidad. También se hizo hincapié en la urgencia de que las empresas integren la corresponsabilidad en su ADN y la necesidad de que estas acciones no sean solo campañas de marketing, sino un verdadero cambio estructural dentro de las organizaciones.

La Red Yo cuido: un espacio seguro y colaborativo

El corazón de esta nueva propuesta es sencillo pero profundo: crear una red que conecte a madres en la misma zona para intercambiar cuidados, apoyo y amistad. Pensada en un formato amigable y accesible, la app funciona como un «Tinder de las madres», ayudándote a conectar con otras madres cercanas que pueden ofrecer ayuda cuando más la necesitás, ya sea alguien para recoger a tu hija de la escuela o simplemente compañía para ir al parque con los niños. La idea es encontrar rápidamente el apoyo necesario, estableciendo conexiones basadas en cercanía y afinidades, de una forma similar a como se conectan las personas en redes sociales de citas, pero con el propósito de compartir y apoyar en el cuidado.

Uno de los puntos más discutidos durante la presentación fue el esfuerzo puesto en asegurar que la aplicación fuese lo suficientemente intuitiva para que una madre pueda crear su perfil incluso «empujando el carrito a las 5 de la mañana». Violeta Gibaja, responsable de diversidad e inclusión para Europa en Globant y una de las voces principales del proyecto, destacó que la clave para que la red funcione es la sencillez de uso y la confianza que genera el vínculo entre las usuarias: «Queremos que las madres sientan que no están solas, que hay otras mujeres dispuestas a compartir el peso de los cuidados, sin juicios y con mucho amor». Gibaja también subrayó la importancia de crear un entorno en el que las madres se sintieran realmente respaldadas, afirmando: «Muchas de nosotras hemos llegado a este punto porque alguna vez hemos necesitado una tribu y no la hemos encontrado. Esta red busca llenar ese vacío, ofrecer esa tribu y asegurarnos de que ninguna madre tenga que sentirse sola nuevamente».

En palabras de Baena, este servicio es parte de un compromiso mayor del Club de Malasmadres por «cambiar el modelo social de maternidad, luchando por una conciliación real y una corresponsabilidad efectiva», una visión que ha guiado cada uno de sus proyectos y que hoy sigue más vigente que nunca. La app no solo es una herramienta de intercambio, sino un recurso concreto que facilita redes de apoyo que trascienden lo digital para impactar en el día a día de las madres.

El compromiso social y la tecnología: innovación al servicio del cuidado

El desarrollo de la Red no habría sido posible sin la colaboración tecnológica de Globant, cuyo equipo se comprometió profundamente con la causa. Gibaja relató cómo la conexión con Malasmadres se produjo desde lo personal: «Muchas de nosotras, incluidas yo misma, llegamos a España con una necesidad desesperada de tribu», recordó conmovida, refiriéndose a la soledad que enfrentan las madres migrantes o relocalizadas, lejos de sus redes de apoyo tradicionales.

La plataforma no solo busca ser útil para quienes ya están familiarizadas con el entorno digital, sino también convertirse en un «entorno seguro en el que las madres se sientan respetadas y respaldadas«. Aquí, se pone en juego no solo la usabilidad, sino también la seguridad emocional de sus usuarias, con el objetivo de hacer de esta aplicación una herramienta de uso diario, parte de la rutina de cada madre, una extensión natural de su vida.

Cifras que interpelan

Durante la presentación, Maite Egoscozabal, Directora de Investigación Social del Club de Malasmadres, presentó los datos de la encuesta «Yo Cuido, Nosotras Cuidamos», que reflejan la realidad de muchas madres en España. El 95% de las mujeres afirmaron sentirse solas desde que son madres.

Además, el estudio destaca que el 60% de las madres experimenta sentimientos de culpa al delegar el cuidado de sus hijos en otras personas. Solo el 45% de las encuestadas está dispuesta a intercambiar cuidados con otras madres, principalmente debido a la falta de confianza y a la inseguridad que implica delegar el cuidado de sus hijos.

Estos hallazgos subrayan la necesidad de crear redes de apoyo que fomenten la corresponsabilidad y reduzcan la carga emocional que enfrentan las madres. Esta soledad, apuntó Bortozada, está relacionada no solo con la falta de apoyos informales, sino también con la falta de corresponsabilidad en el hogar y la ausencia de redes de apoyo cercanas.

Es aquí donde la aplicación entra en acción para derribar estas barreras, ofreciendo un espacio donde las madres puedan construir esos vínculos previos, conocerse, y así reducir ese sentimiento de culpa que tantas veces paraliza.

Hacia un cambio sistémico

La red Yo Cuido es solo el primer paso en un cambio mucho mayor. «Nosotras seguimos luchando por un plan nacional de conciliación», enfatizó Baena durante la presentación, y la red de cuidados es parte de esa visión: una solución inmediata, mientras se trabaja por lograr transformaciones políticas y sociales profundas.

Además, se mencionó la posibilidad de expandir esta iniciativa a otros contextos como los hogares monomarentales en Argentina, el acceso a comunidades rurales que enfrentan desafíos particulares de aislamiento y falta de recursos, e incluso abrir el acceso para que padres u otros miembros de la familia puedan participar, amplificando así el esfuerzo de corresponsabilidad en el cuidado.

Esta expansión buscaría ofrecer soluciones inclusivas y adaptadas a las distintas realidades, favoreciendo que el cuidado no sea una responsabilidad exclusiva de las madres, sino que pueda ser compartido por todos los miembros de la comunidad. Es un puente entre la realidad actual de muchas madres y el futuro con el que sueñan: «un modelo donde el cuidado esté delante del trabajo, donde las madres no tengan que elegir entre su vida profesional y su vida personal«.

Globant también se pronunció sobre la importancia de esta alianza, y Violeta Gibaja remarcó cómo este tipo de colaboraciones deberían ser un ejemplo para otras empresas: «No solo es posible, es necesario que las empresas se comprometan con la transformación social desde dentro, alineando sus valores con los de la comunidad a la que desean impactar». Gibaja también señaló la importancia de que la aplicación pueda llegar a comunidades rurales y contextos vulnerables, asegurando que el acceso al cuidado no sea limitado por la ubicación geográfica o las condiciones socioeconómicas. «Tenemos la responsabilidad de asegurar que iniciativas como esta sean accesibles para todas, desde madres en grandes ciudades hasta aquellas en áreas rurales que enfrentan aún más desafíos para encontrar apoyo».

El valor de la comunidad

Lo que comenzó hace años como una cuenta en Twitter donde madres compartían las dificultades de la maternidad moderna ha evolucionado hasta convertirse en un movimiento que hoy conecta a miles de mujeres en toda España. La Red Yo cuido, nosotras cuidamos representa ese espíritu de sororidad y apoyo mutuo que siempre ha caracterizado al Club de Malasmadres, pero lo lleva a un nuevo nivel, proporcionando una estructura formal, organizada, y sobre todo, accesible, para que todas puedan beneficiarse de ella.

Baena concluyó la presentación visiblemente emocionada: «El Club de Malasmadres es la prueba de que cuando nosotras nos unimos, todo cambia. Hoy comenzamos una nueva etapa, y no tengo dudas de que esto es solo el principio».

Para todas aquellas madres que desean formar parte de esta nueva tribu, la aplicación estará disponible en España a partir de finales de febrero de 2025.