El movimiento anti-DEI gana fuerza mientras Ford abandona el índice LGBTQ+

Por Nathan Bomey. Nota publicada originalmente en Axios y traducida por Diversa.

Varias grandes empresas de Estados Unidos han dejado de comprometerse públicamente a proporcionar un entorno de trabajo inclusivo para los empleados LGBTQ+.

Por qué es importante: Es un signo concreto de cómo el movimiento anti-DEI está sacudiendo las corporaciones de Estados Unidos.

La noticia: Ford ha confirmado hoy que es la última empresa que se retira del Índice de Igualdad Corporativa de la Human Rights Campaign por la presión de un activista de derecha.

Ilustración: Allie Carl/Axios

El CEO de Ford, Jim Farley, comunicó a los trabajadores en una carta que la compañía se había retirado del índice y no participará en otras listas de «mejores lugares para trabajar», afirmando que Ford seguirá fomentando «un entorno en el que todos podamos hacer nuestro mejor trabajo anclados en el respeto y la inclusión».

Harley-Davidson y Brown-Forman, propietaria de Jack Daniel’s, también confirmaron que ya no participarán.

Lowe’s, que no respondió a los pedidos de comentarios, también se ha retirado del índice HRC.

Zoom in: Una puntuación perfecta de 100 en el índice HRC es el estándar de oro para las empresas que quieren demostrar que están comprometidas con las causas LGBTQ+, algo de lo que las empresas alardeaban abiertamente hasta no hace mucho.

Pero el sistema de puntuación se está viendo cada vez más envuelto en una campaña conservadora para castigar a las empresas que siguen invirtiendo en iniciativas de diversidad, equidad e inclusión.

Otras empresas que han declarado recientemente que ya no adoptan programas de DEI son John Deere y Tractor Supply.

Brown-Forman, que lanzó su estrategia de diversidad e inclusión en 2019, está modificando su enfoque: «ahora que el mundo ha evolucionado, nuestro negocio ha cambiado y el panorama legal y externo ha cambiado drásticamente, particularmente dentro de los Estados Unidos», dijo la vocera Elizabeth Conway en un correo electrónico.

Cómo funciona: El Índice de Igualdad Corporativa de HRC puntúa a las empresas en función de una amplia variedad de categorías, incluidas las políticas de no discriminación, los beneficios para cónyuges y parejas, los beneficios inclusivos para personas trans y el compromiso con la comunidad LGBTQ+.

En el índice 2023-24, más de 1.380 empresas proporcionaron suficiente información para recibir una puntuación, incluidas 378 de las 500 empresas de Fortune.

Casi 600 obtuvieron una puntuación perfecta, entre ellas Apple, Amazon, AT&T, Bank of America, CVS, Disney, Ford, General Motors, Google, IBM, JPMorgan Chase, Microsoft, Procter & Gamble, Toyota y Walmart.

Lo que dicen: HRC se negó a discutir cuántas empresas han salido recientemente del índice, pero el vicepresidente de ciudadanía corporativa y tecnología inclusiva, Eric Bloem, restó importancia a la tendencia y dijo que el número total está creciendo.

«Estamos hablando de un puñado de empresas», dijo a Axios en una entrevista. «Es una fracción» de los participantes.

Contexto: Una de las principales fuerzas detrás del impulso anti-DEI es el activista de derecha Robby Starbuck, quien se atribuyó el mérito de que Lowe’s y Ford abandonaran HRC y otras iniciativas Pride después de amenazar con «exponer sus políticas woke.»

«Ahora estamos forzando a organizaciones multimillonarias a cambiar sus políticas sin ni siquiera publicarlas, sólo por miedo a ser la próxima empresa que denunciemos», dijo Starbuck en X.

Bloem, de HRC, reconoció que «las empresas están sometidas a la presión» de los activistas en línea, pero dijo que sigue siendo de su interés mantener su compromiso con la comunidad LGBTQ+ en lugar de tomar decisiones «miopes».

«El éxito empresarial a largo plazo significa realmente centrarse en esos valores de inclusión y adoptarlos», afirmó Bloem. Las empresas que siguen participando en el índice «entienden que las personas, los empleados y los clientes LGBTQ+ son fundamentales para el éxito de su negocio».

Afirmó que a las empresas que abandonen los compromisos LGBTQ+ les resultará especialmente difícil atraer a los consumidores y empleados más jóvenes.

Según una reciente encuesta de Gallup, más de uno de cada cinco miembros de la Generación Z se identifica como no heterosexual.