La salud mamaria como derecho: lo que sabemos sobre el cáncer de mama en Argentina

En Argentina, solo 4 de cada 10 mujeres tienen información suficiente para cuidar su salud mamaria. Esa es una de las conclusiones que arroja el Índice de Concientización de Cáncer de Mama, una herramienta desarrollada por Fundación Instituto Natura y Avon en el marco de Octubre Rosa. Además, el cáncer de mama registra alrededor de 22.000 casos nuevos por año y 5.750 muertes en 2022, según datos oficiales y estimaciones internacionales.

Pero la detección temprana no depende solo de la voluntad individual. El estudio, realizado a más de mil mujeres en todo el país, muestra cómo el acceso al cuidado y a la información está atravesado por múltiples desigualdades: clase, edad, territorio, nivel educativo. No todas parten del mismo lugar ni tienen las mismas herramientas para ejercer su derecho a la salud.

“Muchas veces, no se trata de falta de voluntad ni de desconocimiento: se trata de derechos que hoy no están plenamente garantizados. El cuidado de la salud mamaria debe ser un derecho accesible, sostenido por políticas públicas, acompañado por el sistema de salud y asumido como una responsabilidad social compartida”, afirma Florencia Mezzadra, Gerenta de Fundación Instituto Natura.

Un índice para mirar más allá del mes rosa

El nuevo Índice no solo mide conocimiento. También revela que, si bien el 70% de las mujeres encuestadas conoce a alguien que atravesó un cáncer, y muchas lo asocian al de mama, esa cercanía no se traduce en prácticas de autocuidado ni en un conocimiento profundo sobre la enfermedad.

También interroga prácticas, percepciones, miedos y vacíos. ¿Qué se sabe (y qué no) sobre los síntomas, las pruebas de detección y los derechos que garantiza el sistema de salud? ¿Qué mitos siguen vigentes? ¿Qué obstáculos enfrentan las mujeres para adoptar hábitos de cuidado?

Entre otros hallazgos relevantes:

  • Solo el 40% de las mujeres tiene un conocimiento alto o muy alto sobre salud mamaria.
  • 6 de cada 10 creen que el nódulo es el principal signo de cáncer de mama, aunque la enfermedad puede ser asintomática en sus etapas iniciales.
  • 2 de cada 10 conocen la edad recomendada para iniciar la mamografía en mujeres sin antecedentes.
  • La mitad conoce que estudios como mamografías y ecografías están cubiertos con indicación médica en el marco del Programa Médico Obligatorio (PMO), según la normativa vigente.

También se identificaron barreras estructurales: el 58% de las mujeres que adoptan hábitos saludables para reducir riesgos (como actividad física, alimentación equilibrada y chequeos regulares) pertenece a sectores con mayor nivel educativo y económico.

En este contexto, la Provincia de Buenos Aires informó que comenzará a indicar mamografías a partir de los 40 años en el sistema público. El anuncio fue realizado en este mes por el Ministerio de Salud bonaerense.

Un recurso valioso para el ecosistema empresarial

En diálogo con Diversa Noticias, Florencia Mezzadrareflexionó sobre el rol de las empresas y organizaciones a la hora de pensar la salud mamaria como un derecho. Para ella, el sector privado “puede y debe tener un rol activo de impacto positivo en su entorno: social, humano y ambiental”.

En esa línea, explicó que desde la Fundación Instituto Natura trabajan junto a Avon con el objetivo de promover la salud y los derechos de las mujeres en Argentina y otros cinco países, a través de acciones con sus colaboradores y la red de consultoras. El trabajo, detalló, incluye alianzas con organizaciones y profesionales de la salud para disponibilizar información y recursos como mamografías y telemedicina, especialmente a través de la red de Consultoras Independientes.

Mezzadra subrayó que este compromiso también debe reflejarse en las cadenas de valor de las empresas, promoviendo el cuidado integral de todas las personas que las integran. “Los modos en que pueden hacerlo son diversos y deben adaptarse a la cultura y las realidades de cada comunidad laboral”, señaló, y mencionó algunas estrategias posibles: incorporar la conversación sobre el cuidado mamario en las políticas de bienestar, otorgar tiempo para realizarse controles, difundir información confiable o facilitar el acceso a servicios de salud.

Desde la Fundación Instituto Natura, junto a Avon, vienen impulsando estrategias de concientización y diálogo constante, articulando con distintos actores sociales. “Contar con este Índice nos permite saber dónde estamos parados como sociedad y hacia dónde debemos avanzar para lograr un mayor acceso a todos los aspectos que hacen a la salud de las mujeres”, afirmó Mezzadra.

Según explicó, el valor de este instrumento radica en las conversaciones que habilita: “entre organizaciones, en los medios, en las políticas públicas y en la vida cotidiana”. Para la gerenta, el Índice ofrece una imagen compleja y urgente del nivel de concientización sobre el cáncer de mama en Argentina, y su propósito es servir como insumo público que oriente estrategias, abra debates y ayude a jerarquizar prioridades en torno a la salud mamaria.

“El lanzamiento es apenas un primer paso”, advirtió. A partir de ahora comienza un proceso de posicionamiento y socialización para que el Índice “sea realmente de la comunidad, una herramienta que pueda ser tomada por distintos actores, organizaciones sociales, instituciones de salud, empresas y decisores públicos”.

Finalmente, Mezzadra destacó que Fundación Instituto Natura y Avon trabajan durante todo el año en acciones de concientización y generación de conocimiento para fortalecer el cuidado de la salud mamaria. En ese marco, el Índice busca consolidarse como un recurso abierto y dinámico, capaz de actualizarse periódicamente y nutrirse del trabajo conjunto entre sectores.

Políticas públicas, acceso y corresponsabilidad

Uno de los aportes del informe es visibilizar que la salud mamaria no puede abordarse solo desde campañas de sensibilización o responsabilidad personal. Requiere políticas públicas sostenidas, acceso equitativo a controles, financiamiento del sistema de salud y una transformación cultural que habilite conversaciones informadas sobre los cuerpos, los miedos y los derechos.

El desafío, entonces, no es solo informar, sino garantizar condiciones materiales para que esa información se traduzca en prácticas de cuidado real. Y eso implica revisar cómo los distintos actores —Estado, empresas, obras sociales, medios, organizaciones— contribuyen (o no) a ese objetivo.

Metodología del estudio

  • Encuesta a 1.077 mujeres mayores de 18 años en todas las regiones del país: Buenos Aires, Centro, NOA, NEA, Cuyo y Patagonia.
  • Relevamiento a cargo de Somatório Inteligência junto al equipo de Datos de Fundación Instituto Natura.
  • Muestra estratificada por edad, clase social, región y provincia.
  • Error muestral: ±3% | Nivel de confianza: 95%.
  • Objetivo: conocer nivel de información, percepción de riesgo, prácticas de cuidado y obstáculos en el acceso a estudios de detección precoz.

Los principales resultados del estudio pueden descargarse aquí.